Hace años, tal día como hoy, 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer (antes, Día de la Mujer Trabajadora, _alguien se dio cuenta de que las mujeres siempre estamos trabajando_ ;) estaba comenzando una nueva etapa profesional. Nuevo trabajo, nuevos compañeros, horario nocturno, la necesidad de desplazarme a otra ciudad... Todo era nuevo y como tal, un reto. Y es que salir de la que llaman zona de confort no es fácil pero, a veces, la vida que te pega una patada y te manda fuera; y sí, la primera vez, parece que no hay salida pero la hay, claro que la hay.
Eran otros tiempos, me diréis. Sí, eso decían, los tiempos de "España va bien" aunque creo que para una profesión como el periodismo los "buenos tiempos" siempre fueron una utopía. Prácticas gratis o con suerte, unos 138 euros (pesetas de entonces) porque "para unas cervecitas bien te llegan, que vives en casa". En fin, lo que se llega a oír del de detrás de la mesa del jefe de turno...
La situación siempre fue precaria en Periodismo (hoy todavía más). Pero no eran solo las condiciones económicas de la profesión, lo que me a mí me quemaba, era mi propio convencimiento personal de que no me veía jubilándome como periodista pero... ¿cómo cambiar? ¿hacia dónde dirigirme? Debo de reconocer que siempre me han dado un poco de miedo los cambios, soy de las que "¿¿¡¡cómo voy a dejar un trabajo "fijo" por una aventura en solitario!!??" pero no siempre tienes elección y ese trabajo "fijo", "indefinido" o como le quieras llamar tiene fecha de caducidad. Ahora sé que SIEMPRE tiene fecha de caducidad porque aunque no lo ponga en el contrato, ser empleado es estar continuamente en la cuerda floja aunque esté disfrazado de contrato indefinido.
¿Quién está libre de un ERE? ¿De llegar un día a la empresa y encontrarla cerrada? ¿De que te adeuden X nóminas? ¿De que prescindan de tus servicios por X motivos?... Mil y una circunstancias que hacen que, a día de hoy, la seguridad de tener un empleo sea de todo menos seguro. Por eso, hay que optar por el plan B, el C, el D... o el que haga falta.
Los periodos de desempleo que no de paro deben de servir para crecer, no para pasar ocho horas mandando CV, sino para formarte, para ir adquiriendo conocimientos que, estando empleado, serían muy difíciles de adquirir por falta de tiempo. En mi caso, mejorar el inglés, máster en Protocolo y, ahora, el mayor giro de mi vida, pero con el que me siento más feliz, estudiar Estética y concretamente, Maquillaje, que siempre me ha encantado pero que no dejaba de ser un hobbie.
A día de hoy hay 5,4 millones de parados, dos veces la población de Galicia, y muchos de ellos no volverán a emplearse porque el mercado laboral rechaza a los mayores. A partir de ciertas edades, estoy convencida de que solo queda una salida, el autoempleo, reciclarse, volver a los orígenes y empezar una nueva vida haciendo lo que a uno le hace feliz.
Son muchas las opciones que hay de autoempleo, si me apuras, una por persona, pero hay algunas que pasan inadvertidas porque solemos ver únicamente lo que ya conocemos y no nuevas alternativas que nos permitirían partir de cero sin inversión o con una inversión mínima. Una de ellas es la oportunidad de negocio que ofrece Oriflame que ha ayudado y sigue ayudando a cumplir los sueños de miles de personas. Te invito a conocerla y a hacerte socio aquí y empezar una vida nueva.
"Para abrir nuevos caminos, hay que inventar; experimentar; crecer, correr riesgos, romper las reglas, equivocarse… y divertirse” (Mary Lou Cook)
Que buen post, tienes toda la razón. Yo por mi parte si vivo la vida que quiero y estoy estudiando lo que me gusta:) vamos a ver que tal se da. Feliz dia <3
ResponderEliminarMuchas gracias. Me alegra que estés haciendo lo que realmente quieres, hay muchas personas atrapadas en un trabajo que no lo saben. Espero que hayas pasado un feliz día también. Besos
ResponderEliminarUn post muy reflexivo, yo ahora mismo estoy '' bien" en comparación con la lamentable situación del país. Ojalá mejore el empleo porque hay mucha gente que lo esta pasando realmente mal. Saludos
ResponderEliminarCreo que el 8 de marzo es día para reflexionar por todo lo que representa y sí, ojalá mejore; pero como tengamos que depender de otros que lo único que quieren es maquillar las cifras de paro para ganar votos... Saludos!
Eliminar¡Genial post! Que nada es seguro, eso ya se sabe y se siente en las propias carnes. Y que hay que buscar otros caminos, que quizá sean duros y arriesgados, también.
ResponderEliminarGracias. Nada regala nada pero arriesgarse y luchar por los sueños siempre merece la pena.
EliminarMuchas gracias por tu comentario. Besos