En cuanto lo ví en el catálogo sabía que lo iba a comprar sí o sí. Estoy hablando del nuevo kajal The One de Oriflame que salió como novedad en el catálogo anterior. Como sabéis, había tenido malas experiencias con kajal de la línea Very Me porque se le rompía la punta con mucha facilidad. Aquí lo podéis ver. Así que estaba claro que tenía que probar el nuevo porque el formato era/es como una barra de labios; es decir, que la punta sale al girar el envase.
Y a la tercera, fue la vencida. ¡Por fin pude utilizarlo sin que se rompiera la punta! Ya os comentaba en el post anterior que la aplicación no es como un lápiz de ojos normal sino que hay que aplicarlo en horizontal (así la punta siempre estará afilada, además) y sirve no solo para pintar la raya del párpado, sino también la waterline por arriba y por abajo. El efecto de pintar la raya interior arriba permite una mirada más definida pero sutil; además si completamos pintando entre las pestañas de abajo se verán los ojos diferentes, más sugerentes, pero sin recargar. Nos verán diferentes pero no lograrán adivinar el porqué :)
No me enrollo más. He aquí el resultado. En otro post os contaré qué maquillaje, sombras y demás llevo. La pena es que las fotos del móvil no dejan apreciar muy bien el acabado (tendré que escribir la carta a los Reyes Magos... pero es tan larga que el pobre camello se va a negar a subir ;)
Aquí un detalle del ojo:
En cuanto al producto en sí he de decir que tiene mucha pigmentación, en la foto anterior lo podéis ver perfectamente, ya que está sin difuminar. Además, la punta es suave y blandita por lo que no hace daño al párpado. Y lo mejor de todo, ¡no me da alergia! En este sentido, estoy encantada con Oriflame porque ya he probado unos cuantos lápices y resisten mis "condiciones".
Si os ha gustado, podéis compartir; si queréis dejar algún comentario estaré encantada de leerlos.
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